Empleo: ganadería y producción agroalimentaria

La Fundación Antonio Romo apuesta por la inserción laboral de los jóvenes participantes en el proyecto, centrando sus actuaciones en la agricultura, ganadería y producción agroalimentaria.

Desde el marco del proyecto “Mil Caminos” se gestiona una explotación ganadera que consta de más de 500 cabezas de ganado ovino y se producen cinco mil kilos de queso de oveja anualmente. La instalación está compuesta de una nave para albergar al ganado, un silo, dos depósitos, un almacén, la sala de ordeño y un emplazamiento adyacente dedicado de manera exclusiva a la producción de queso y su posterior venta. Así mismo, la rodea una parcela de 13 hectáreas de regadío con pivot empleadas para el cultivo de forraje para el ganado.

Todas las instalaciones de la explotación son movidas por energía solar producida con placas fotovoltaicas propias. Se evita, por tanto, la emisión de dióxido de carbono en un compromiso por preservar el planeta y disminuir el impacto en el cambio climático. Añadir que el sistema de producción y elaboración de los quesos es respetuoso con el medio ambiente. Este producto, que lleva por nombre “Queso Mil Caminos” se comercializa directamente al consumidor, sin intermediarios, priorizando la salud alimentaria y el trato cercano para poner en valor la calidad del producto y el proyecto en sí mismo.

En la labor diaria participan de manera continuada el equipo de pastoreo, compuesto de dos personas y otras dos que se encargan de todas y cada una de las fases de elaboración del queso. Estos dos equipos, además del desarrollo del oficio, son participantes activos del proceso formativo del resto de jóvenes. El trabajo con las ovejas, los corderos y los quesos posibilita la asunción de responsabilidades, implicándose en la vida de los animales, superando las limitaciones y potenciando las capacidades personales.

Formación

B.1.- Escuela de pastores y quesería

Durante la iniciativa, las personas responsables enseñan a los jóvenes participantes en qué consiste todo el proceso de manejo del rebaño, basándose tanto en las formas tradicionales como en las nuevas técnicas. Así mismo, aprenden cuestiones relativas a los cuidados, alimentación y proceso de ordeño. Para asegurar un contacto directo y manejo efectivo, la formación se realiza en grupos reducidos que hacen turnos rotatorios semanales.

En cuanto a la elaboración del queso, se forman en todas las etapas de la fase de producción, desde que se ordeña a las ovejas hasta que se obtiene el producto final. Lo hacen guiados y supervisados por el maestro quesero. Adquieren las habilidades necesarias para manejarse en todas las fases de producción y los distintos emplazamientos: sala de ordeño, lechería, quesería, salas de fermentación y conservación de los quesos, sala de ventas…

El objetivo es el mantenimiento de un equipo de trabajo estable, formado, motivado e implicado en la labor que desempeñan, diferenciando funciones orientadas a cada una de las dos labores principales: el manejo y cuidado del rebaño y la elaboración de quesos. Ambos grupos están formados de manera prioritaria por personas provenientes de la exclusión a quienes, una vez formados, se ofrece la posibilidad de tener un contrato laboral.

B.2.- Formación Profesional

Desde el Centro Integrado de Formación Profesional Lorenzo Milani estos jóvenes titulan en Formación Profesional Básica (F.P.B) y la E.S.O., en las ramas de agrojardinería, cocina, soldadura y mecánica; así como en Grado Medio de Jardinería y de Conservación del Medio Natural y Grado Superior tanto de Integración Social como de Gestión Forestal. Además, se imparten cursos como el de Agricultura Ecológica para la obtención de Certificados de Profesionalidad.

Estos jóvenes encuentran en la Formación Profesional una fuente de motivación, van consiguiendo sus objetivos, ven el resultado de su esfuerzo y se produce una retroalimentación positiva que repercute en su autoestima y sentimiento de utilidad y pertenencia social. Encuentran en la F.P. una alternativa real de inserción sociolaboral, un nuevo camino para un porvenir posible.

Vivienda

Desde la Casa de Acogida de Puente Vida se ofrece vivienda y manutención a personas inmigrantes y refugiados, además de apostar por su educación y alfabetización contando, por ejemplo, con el Colegio Calasanz, desde donde colaboran con sus modernas aulas informáticas y su potencial educativo y desde el CIFP Lorenzo Milani donde estudian F.P.B. y la E.S.O.

En la Casa Escuela se ofrece vivienda y terapia a partir del Modelo Constructivista Sistémico y Centrado en Soluciones, a nivel individual, de grupo y por parejas, para afrontar la soledad y la mendicidad afectiva de los chicos y chicas que residen y estudian en la misma. Esto deriva del abandono sufrido a nivel familiar y social, que les lleva a diagnósticos de Trastorno del apego, Síndrome Alcohólico Fetal, Trastorno por Estrés Postraumático y Patología Dual asociada al consumo de tóxicos.

Además, en el recinto de la quesería hay una pequeña vivienda independiente para alojar a dos o tres personas que se dedican de manera continuada al trabajo con los animales o la elaboración del queso, así como para el cuidado y mantenimiento de las instalaciones.

Así mismo, se cuenta con proyectos para la ocupación saludable del tiempo libre, abiertos a los adolescentes y jóvenes tanto de la Casa Escuela como de la Casa de Acogida. Entre estos proyectos se encuentran la Escuela de Circo, UNOCINE, Escuela de Animación y Club Deportivo. Estas actividades, donde se trabaja además de la dimensión social el aspecto emocional, forman parte del proceso integrador que se busca con el proyecto “Mil Caminos”.